El rol del anciano en la IASD

INTRODUCCIÓN

“Uno de los más elevados y más importantes cargos que está  puestos al servicio de la iglesia es el del anciano” (pag 86). El anciano o presbíteros es la persona idónea moral y religiosa para servir a la iglesia conforme a sus dones junto con los demás dirigentes.

Breve historia de los ancianos.

A.              En el Antiguo Testamento existía el cargo de anciano como podemos ver en  Éxodos 18:21 que dice: “Pero selecciona de entre todo el pueblo a hombres capaces, temerosos de Dios, hombres íntegros que aborrezcan las ganancias deshonestas, y ponlos al frente de ellos como jefes de mil, de cien, de cincuenta y de diez”. Como ejemplo podemos mencionar los setenta ancianos y los 24 que dirigían al pueblo de Israel.   

B.              En los primeros siglos de la iglesia cristiana primitiva, al desaparecer el servicio del templo por el cumplimiento de tipo, anti-tipo, los discípulos vieron la necesidad de organizarse (Hechos 6). Nombraron en el servicio de la iglesia ancianos que se encargaban de administrar la iglesia (Hechos 14:23). Como consecuencia los pastores cumplían con la obra de evangelizar nuevos territorios.

C.              La iglesia adventista, identificándose con la Gran Comisión que le fue encomendado a los apóstoles por Jesús, sintió la misma necesidad de una organización bien estructurada y en el 1863 se lleva a cabo tal hecho.

El adventismo en este tiempo estaba en completa armonía con los principios que los discípulos del primer siglo enseñaron. El laicado llevaba a cabo el ministerio, y los pastores estaban libres para evangelizar los nuevos territorios. (Revolución en la iglesia, Russel Burill, pag 46)…En sentido general, el pastor adventista debería estar libre del cuidado pastoral” o sea, dejar el cargo de anciano y volver a la predicación de la palabra de Dios. Russel continua diciendo  “los miembros deberían ser enseñados a cuidar de sí mismos y no depender de sus pastores’’. (Revolución en la iglesia, Russel Burill, pag 44…‘’Cuando las iglesias son ayudadas demasiado, se vuelven débiles, sin vida, e impotentes’’ (Reavivamiento del discipulado, Russel Burill, pag 62).

En conclusión, los pastores no eran ancianos sino evangelistas. Por lo tanto, cuando los pastores se convierten en ancianos, nota Russel, se vuelven débiles y sin vida.

El Manual de la Iglesia.

Después de que la iglesia aumento sintió la necesidad de nombrar pastores fijos que tienen funciones de ancianos, ó sea de administrar la iglesia. Muchos miembros están esperando un pastor que les organice toda la iglesia y que les diga lo que tienen que hacer y que no. Pero, esto no es el cargo del anciano?

En este trabajo queremos ver y resaltar las características más importantes del anciano y sus funciones.

1.      La ordenación del anciano

El anciano, después de ser elegido por la congregación local, confiriéndole este estatuto por un año, es ordenado.

La ordenación es muy importante, de hecho no puede ejercer su autoridad como tal sin ser ordenado, solo puede ser director de un departamento hasta que el periodo intermedio se cumpla. “El servicio de ordenación esta  realizado solamente por un ministro ordenado que tenga credenciales de la asociación”(pág. 86).

El rito de la ordenación se realiza mediante la oración e imposición de las manos. Si un anciano ordenado  se traslada a otra iglesia, su ordenación  queda válida, ó sea no es necesario ser ordenado por la segunda vez. 

2.      La obra del anciano de la iglesia es local.

Un anciano sirve solo la iglesia donde fue elegido. De hecho, el no es un ministro ordenado que puede ejercer sus atributos en todas la iglesia. Si hubiera necesidad de un anciano en otra iglesia, la junta directiva de la Asociación/Misión/Campo puede recomendar a la iglesia o las iglesias que inviten al anciano para servirles también.

3.      Relación del ministro ordenado y el anciano.

Como podemos ver más arriba la sugerencia del manual es: “el pastor no debe concentrar en si todas las responsabilidades de la iglesia sino tiene que compartirlas con el anciano” (87). En ausencia del pastor, el anciano es el encargado mayor de la iglesia. El pastor que sirve como misionero, debe ser elegido como anciano en la iglesia que se le otorga de la Asociación/Misión/Campo.

4.      Dirigir los cultos.

Los servicios de culto deben ser solamente efectuados bajo la responsabilidad del pastor o del anciano ordenado. El pastor actúa como presidente de la junta, y en su presencia el anciano debe actuar como presidente.

5.      La ceremonia del Bautismo.

En ausencias del pastor ordenado, el anciano solicita un permiso a la Asociación/Misión/Campo para efectuar dicha ceremonia. Por lo tanto, el anciano debe hacer los arreglos necesarios con el pastor o el presidente de la Asociación o misión local para la administración del rito bautismal (pag 88).

6.      La ceremonia de casamiento.

Los ancianos no pueden tomar los votos y declaración del casamiento. Estos quedan únicamente a los ministros ordenados. Pero, puede presentar el sermón de casamiento, el ofrecimiento de la oración y la bendición de la pareja.

7.      Exhortar a los miembros a participar con sus ofrendas y los diezmos.

El anciano tiene que dar ejemplo en devolver el diezmo a la iglesia, motivando a otros que hagan lo mismo. Este trabajo debe hacerse con tacto de forma que cada miembro sienta su responsabilidad.

8.      Debe promover la obra de las misiones mundiales.

El anciano debe exhortar a los miembro a participar en la obra evangelistica misionera mundial.  Uno de los más importantes asuntos es de provocar en los miembros el hambre de evangelizar con diversos medios y en diversas partes del mundo.

Conclusión

Desde los principio de la formación del pueblo de Dios y hasta nuestro siglo, los ancianos fueron aquellas personas que Dios escogió para administrar, guiar, sostener a sus hijos en la iglesia. Hoy en día, los pastores cumplen con muchas responsabilidades administrativas que les absorbe el tiempo.  La predicación de la palabra de Dios debería ser una prioridad. El Manual de la Iglesia aconseja que los ancianos ayuden a los pastores en su labor y juntos el trabajo sería más fácil y menos penoso para ambas categorías de servidores.